Cuántos de nosostros nos sabemos de memoria los carteles indicativos de los pueblos, donde nunca paramos, cuando hacemos los viajes habituales los fines de semana, verano, etc.
Hace poco, en un uno de esos trayectos por La Ribera navarra, decidí desviarme unos 15Km hacia uno de esos pueblos, Cascante. Pasé un buen rato callejeando por el casco antiguo y sobre las tres de la tarde fui a comer a El Lechuguero, un restaurante que me había recomendado mi amigo Juanjo.
La visita fue grata. Después de acomodarme en una mesa, me trajeron la carta y los bebibles. Mientras la leía, en las mesas de alrededor no hacían más que llegar platos de verduras con una pinta estupenda. Así que, estando en La Ribera, no había que pensar mucho sobre qué elegir.
De primero, una menestra de verduras de esas que sólo te puedes tomar en los sitios donde el producto es fresco y recién cogido. Espectacular. De segundo, cordero, muy bien hecho por cierto. De postre una natillas caseras ricas.
Tras la ingesta, una pequeña siesta en el coche hasta que a los 10 minutos una amable señora del lugar golpeó el cristal con los nudillos, como si le fuera la vida, y me preguntó: “¿Estás bien, majo?”
El Lechuguero
C/ de Romero, 6. Cascante.
www.ellechuguero.com